domingo, 30 de julio de 2006

[F1] Gran Premio de Alemania [Hockenheim]

Y a pesar de todo, solo restan once puntos.

Como viene siendo habitual el Gran Premio de Alemania de Formula Uno disputado en el circuito de Hockenheim nos ha hecho vivir un fin de semana espectacular. Todavía resuena en la memoria aquel mítico trazado de más de siete kilómetros donde unos monoplazas con el alerón completamente horizontal se adentraban dentro de los bosques de la zona central del país germano. Unas carreras vibrantes en el por aquel entonces uno de los circuitos más rápidos del mundial, mostrándonos unas panorámicas casi de postal y que desgraciadamente nunca más volveremos a ver. La seguridad prima ante todo, y la reciente mutilación del circuito hace gala de ello. A pesar de todo sigue manteniendo ese encanto que lucen los grandes clásicos europeos.

La sesión clasificatoria del sábado no transcurrió con el guión que la mayoría podríamos haber escrito. Pese a volver al viejo continente Michelin no ha logrado encontrar el perfecto equilibrio en sus gomas, aunque no todo el mérito se le puede achacar a los neumáticos. Por otro lado Hermanísimo Schumacher ha vuelto a hacer de las suyas. Creo que al paso que va ya no le quedan ‘amigos’ dentro del campeonato. La maniobra por la que Pedro Martínez de la Rosa clasificó tan atrás tiene la culpa y una vez más el piloto barcelonés a echado mano de su innata diplomacia para zanjar el asunto de un plumazo al achacarlo a un simple lance de carrera (o entrenamientos). Puestos a sacarle punta a nuestro ídolo de masas, el gran Fernandito -cuartodesiglo- Alonso vamos a formularle una pregunta: Señor Alonso, ¿de verdad cree factible que se fuera a investigar la maniobra por la que Michael Schumacher salió delante suya tras el último cambio de gomas en la tercera manga de la sesión de clasificación?. Esto ya parece incluso surrealista, esa costumbre tan española de criticar todo, absolutamente todo, lo va a llevar por muy mal camino. ¿A quién no le recuerda al mejor Michael de mediados de los ’90?

La carrera pintaba bastante bien para Ferrari. Los de Maranello sabían -como sabíamos todos- que la Pole de Kimi era poco significativa para el devenir de la carrera. Y así transcurrió. En la cabeza de la clasificación poco movimiento se ha podido ver durante la primera mitad. El previsible y temprano primer repostaje de Raikkonen ya dejaba entrever que las dos primeras plazas quedaban relegadas a sendos Ferrari. La repentina ‘muerte’ del motor de Pedro ha sido un duro golpe para darle emoción al fin de este Gran Premio ya que si todo hubiera salido correctamente seguro que hubiéramos visto algunos adelantamientos suyos en la horquilla, luchando por entrar dentro de las cinco primeras posiciones. Sin duda eso ha sido lo peor de la carrera. Por otro lado, Fernando intentando no perder el ritmo de carrera, y durante la segunda mitad de la misma con su mente clavada en el panel de tiempos para ver cuanta distancia le sacaba Webber se vio como uno de los más afortunados al ver que el Australiano decía adiós a la carrera. Y es que los Renault no andan finos, y no es plan de despotricar contra Michelin, ya que si fuera por eso, Kimi no hubiera estado tan arriba durante toda la carrera. Algo de culpa tendrá el conjunto chasis-motor, ¿verdad Lobato?.

Y es que estos son otros que también se las traen y que gran premio a gran premio van demostrando una imparcialidad asombrosa, a veces incluso cómica. Seamos sensatos. Si un piloto pierde el control a la salida de una curva y se traga el césped es que iba demasiado pasado y el fallo es suyo por no haber frenado lo suficiente o por haber dado gas demasiado rápido. Pero claro, si al que le pasa eso es a cuartodesiglo Alonso y logra volver a la pista tras unos cuantos volantazos es que el asturiano es un genio del volante y que controla perfectamente el coche tanto en asfalto como el tierra/hierva/lodo o cualquier otro elemento deslizable. Por el contrario, si el que se sale de la trazada es un Michael Schumacher en el carril de entrada al pit, resulta que iba nervioso, no quería perder tiempo, no le gusta perder ni al parchís y demás. Señor Lobato, por favor. Hay mucha afición española que quiere ver la Formula Uno, no solo ver a Fernando Alonso. “Informativos Telecinco: No nos casamos con nadie” ¡¡¡y una m*****!!!

Renault flojos, Ferrari en trayectoria ascendente. Michael Schumacher poco a poco acortando distancias, Fernando Alonso puntuando aunque no como le gustaría. Felipe Massa subiendo 2 posiciones en el ranking del campeonato mundial de pilotos y situándose en tercera posición. Y en dicho campeonato de pilotos solo son 11 puntos ya los que separan al Alemán (89 puntos) del Español (100 puntos) y 10 los puntos que separan a Ferrari (139 puntos) y Renault (149 puntos) del campeonato de constructores. Como llevo diciendo algún tiempo, este campeonato tiene pinta de resolverse en la última carrera. Ojalá.

lunes, 17 de julio de 2006

[F1] Gran Premio de Francia (Magny Cours)

Lo visto en la travesía norteamericana no ha sido un espejismo en absoluto. Podemos echarle la culpa a Bridgestone, al motor, al chasis, incluso a las tuercas que mantienen ensamblado todo el todo el conjunto, pero lo que es cierto es que Ferrari está arriba, que Michael Schumacher va a luchar por el título hasta la última vuelta del campeonato y que nos espera una segunda mitad de temporada que sin duda va a ir de menos a más.

El ya pasado Gran Premio de Francia de Formula 1 nos ha dejado una carrera un tanto insípida, sin demasiada acción en pista (al menos durante los 5 primeros puestos) en la que solo se ha podido ver algo tímidamente activo durante el transcurso de las paradas en boxes, sobre todo para ver qué tal funcionaban las estrategias en los mismos. Tanto Renault (a dos paradas) como Ferrari (tres paradas) sabían lo que hacían en cada momento. Intentar parar a un Kaiser incombustible era una utopía en casa de la escudería del rombo, y es que después de la salida y con el devenir de los giros al circuito galo quedaba claro que -esta vez sí- las gomas hacían un muy buen trabajo. Ha sido un Gran Premio de estrenos, mientras los de Maranello estrenaban paquete aerodinámico, Renault hacía lo mismo con el motor, una nueva evolución de motor que, ahora sí, ponía en igualdad de condiciones a Fernando y a Jarno. Dejaremos atrás los comentarios acerca de los cuernos-apéndices que sin mucho orgullo mostraban los chicos de BMW, y es que parece que hace falta una nueva limpieza del reglamento que elimine esos tipos de cuernos que no hacen más que destrozar el rostro de los pobres monoplazas como ya ocurrió en el ’98 (para más información os remito al artículo publicado en F1 Racing Junio 2006 nº 88 páginas 42-46 en la que nos muestran los orígenes de varios avances en la fisionomía moderna de los Formula 1). Por su parte los Toyota han estado anormalmente fuertes en la presente carrera con un Ralf-hermanísimo Schumacher que debe estar bastante contento con su cuarto puesto, y es que de nuevo se pone en relieve que con el calorcito, los Bridgestone funcionan mejor.

Y la gran promesa del fin de semana, Pedro Martínez de la Rosa, ha logrado un meritorio séptimo puesto en una carrera que seguramente disfrutó el piloto catalán en donde de nuevo se las vio y las deseó para poder adelantar a Webber. Una de cal y otra de arena. Lo mejor de su carrera, los continuos ataques a Mark y lo peor sin duda las lamentables primeras palabras que el piloto barcelonés dedicó al australiano al tacharlo de ‘fullero’ al no dejar que lo adelante. Estimado Pedro, su diplomacia vista en relieve tantísimas veces durante estos años (le recuerdo que lo sigo desde que era probador con Jordan y que jamás olvidaré el spot que terminaba con la frase “Pedro Martínez de la Rosa y Repsol juntos en la competición más exigente... la Formula Uno”) ha brillado por su ausencia en esta ocasión. Espero y deseo que esa declaración haya sido en el tono lo más jocoso posible ya que personalmente no he observado ninguna maniobra de Webber en la que pueda adjudicársele esos adjetivos. Simplemente estaba intentando mantener su plaza lo mejor posible, quizá, en frio, desee matizar sus términos.

Dos puntos menos que recorta el alemán al asturiano en la tabla general del Campeonato reduciendo la distancia entre ambos a tan solo 17 puntos. Algo que sin duda va a enriquecer las próximas carreras, saboreando aún más cada victoria, apurando cada curva al máximo, consiguiendo rendir siempre al 100% y... quién sabe... quizá veamos en Brasil un desenlace como los de la era Schumacher – Hakkinen. Solo en un par de semanas, en Alemania, la casa de Mercedes, continuaremos con este particular culebrón.