Una de las carreras del campeonato mas esperadas por mi parte, y solo ha habido táctica en el box. Ni siquiera la GRAN recta paralela a la de meta ha logrado que veamos esos grandes adelantamientos -incluso triples- con trenecitos incluidos de pasadas temporadas. Lo cierto es que la estrategias de por sí desde antes de la carrera estaban ya predefinidas.
El fallo (o no) de los mecánicos de Renault no ha hecho más que beneficiar al segundo de abordo de la escudería gabacha. Fernando ha resuelto este Gran Premio de una manera excepcional remontado 7 posiciones, claro que todo esto podría haberse visto truncado si Kimi se hubiera mantenido en pista durante toda la carrera. Está más que claro, el finlandés está gafado, si no es una cosa es otra. Una lástima sin duda para el transcurso del mundial.
Para nada hay que restarle la importancia que se merece en esta ocasión a un Fisichella que ha sabido mantener la compostura en cada momento, y que no ha acometido ningún error significativo durante todo el transcurso de la carrera. Estar en primera posición no es una tarea fácil, y más sabiendo a priori que tu compañero de equipo te puede apear de la misma durante los repostajes. Ha sabido llevar el Renault -grandisimo Renault este año también- de la mejor manera posible, y tiene ya en su haber otra merecida victoria.
Los Honda, bueno, mejor hablamos del Honda. Rubens no levanta cabeza, y en esta ocasión su décimo puesto le está sacando los colores más de lo que le gustaría. Queda de nuevo patente que Button puede estar arriba en la tabla, incluso empatado a puntos en la segunda posición del mundial de pilotos con Michael.
Los cambios de motores en los Ferrari no han surtido todo el efecto que se pensaba que íban a tener. Un quinto y un sexto puesto en este GP no es suficiente para lo que nos tiene acostumbrados la escudería italiana. El gravísimo error en uno de los repostajes de Michael le ha relegado a la sexta posición, una posición que hace que se le escape más el asturiano en la clasificación general. A ver si en Australia remontan cabeza las balas rojas y en San Marino -con motores nuevos- vemos una victoria en casa como los tifosi llevamos tanto tiempo esperando.
En fin, un Gran Premio sin demasiadas novedades. Demasiado parecido a cualquier carrera de la temporada pasada, promoviendo igualmente los mismos clichés y no haciendo honor al gran circuito tan propicio para los adelantamientos tanto en curvas como en rectas. Quince días por delante y veremos, después de madrugar de nuevo, que tal funcionan en el circuito semi-urbano austral.
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